Sadam Husein

La guerra del golfo (o supuesta guerra del golfo... la forma como U.S.A. maneja la información ya me deja pensando en cualquier teoría de conspiración que se me ocurra) tuvo como uno de sus máximos referentes a Sadam Husein quien, en la década del ochenta y en plena guerra con Irán (del ayatolah y demás yerbas fundamentalistas) fue financiado enormemente por U.S.A. No voy a ser tan ingenuo de no pensar que esto es más que posible en nuestro mundo: Hoy U.S.A. financia un gobierno "libre" (que concepto manejarán de la libertad???) y mañana lo condena e invade su territorio por considerarlo una amenaza, amenaza, claro está, previamente armada por ellos. No hay mucho que decir, al simple razonamiento, todos los justificativos del país del norte se caen a pedazos como una máscara rota. La máscara que oculta sus verdaderas intenciones. Esto me hace dudar del nivel de análisis de la población norteamericana o bien de la facilidad con que se les lava el cerebro en la frenética busqueda de recursos disfrazando todo de "guerras por el bien de la libertad"... libertad de ellos, claro está.

Para cerrar, una carta de lectores de el diario por excelencia de mi ciudad (no es que sea realmente bueno, solo que es el único y mi city es de no aceptar muchos cambios que digamos...) un tanto exaltada y que, claramente, no va a llegar a ningún lado (aunque pensando en teorías de conspiración, todo es posible, je) pero que deja translucir que, tras la capa de medias verdades que nos deja ver cnn y otros medios, quienes tienen una actitud crítica no pueden de ninguna manera, dejarse engañar por la propaganda.

Un mensaje para Mr. Bush Lo acusaron e invadieron por tener armas atómicas. No tenía nada. Le mataron 670.000 árabes por ese motivo. A él (al margen de cualquier juicio de valor sobre su gestión política) lo ahorcaron. A quienes mandaron a matar en un verdadero genocidio: nada. El mundo civilizado, occidental y cristiano no debe olvidar este atropello para que nunca vuelva a repetirse. Por favor: no alienten diferencias internas, dejen vivir en paz al mundo árabe. Déjenlos vivir como les mandan su religión y sus costumbres. Respétenles su gas, su petróleo, en fin, sus riquezas. No olviden los principios cristianos: “No matarás” y “no mentirás”. ¿Estamos, Mr. Bush?

Elías Soso, DNI 6.028.264

Volviendo a la población de U.S.A., un dicho que por viejo, no deja de ser cierto: "no hay peor ciego que el que no quiere ver"

Ariel